El Panathinaikos fue el gran ganador del derbi contra el AEK por la segunda jornada de los playoffs de la Superliga Stoiximan. Los Verdes buscaban desesperadamente los tres puntos y se mostraron clínicos y efectivos en su juego, logrando una valiosa victoria por 3-1 en el OAKA.

Los Verdes se adelantaron temprano pero no lograron aprovechar el impulso, y parecieron afectados por el gol encajado al inicio del segundo tiempo. Sin embargo, las intervenciones de Rui Vitória, al introducir a Djuricic, Cerin y Jeremejeff, ayudaron al equipo a recuperar el control del campo y lograr una victoria importante.

El Panathinaikos comenzó el derbi con fuerza, mostrando su intención de imponer su juego. Llevó el partido a su ritmo y, tras un gol anulado a Tete en el minuto 12, abrió el marcador cinco minutos después. En el minuto 17, su presión y buen juego en conjunto dieron frutos. Unai abrió para Tete, quien asistió al avanzado Vagiannidis por la derecha.

El lateral internacional, que alcanzó las 100 apariciones con el Panathinaikos, lanzó un centro preciso a Swiderski, quien cabeceó. Brignoli lo atajó con dificultad, pero Maksimovic, que leyó bien la jugada, siguió la acción y con otro cabezazo mandó el balón a la red para el 1-0, su cuarto gol de la temporada.

Los Verdes tuvieron otra buena ocasión con una carrera de 40 metros y disparo diagonal de Pellistri en el minuto 25, mientras que el AEK había amenazado en el 28’ con un cabezazo de Vida detenido por Dragowski, y en el 31’ con un disparo desviado del croata dentro del área. El arquero polaco realizó otra atajada clave en el 45’ a otro cabezazo de Vida, manteniendo la ventaja hasta el descanso.

El segundo tiempo no empezó bien para el Panathinaikos, que encajó gol en el minuto 47. Tras un córner cobrado por Lamela, Pierrot ganó el primer cabezazo, aunque cometiendo falta sobre Vagiannidis. El balón pegó en el travesaño y Moukudi, que aprovechó el rebote, anotó desde cerca para empatar 1-1.

Los Verdes reaccionaron rápido, amenazando en el 52’ con un cabezazo de Tete que se fue por encima del travesaño. AEK también tuvo oportunidades: en el 64’ con un disparo de Pierrot dentro del área y en el 68’ con un intento de Eliasson que Dragowski atajó brillantemente.

Más tarde, con la entrada de Djuricic y Cerin en el 65’ y Jeremejeff en el 74’, el Panathinaikos se volvió más peligroso, generando situaciones en el área del AEK. Pero ni Mladenovic ni Djuricic lograron marcar en el 76’-77’.

Eso cambió en el minuto 80, cuando Mladenovic ganó su duelo con Pineda y asistió a Djuricic. El media punta serbio disparó un espectacular remate cruzado al rincón izquierdo de Brignoli, anotando el 2-1 con su undécimo gol de la temporada.

Djuricic creó otra jugada peligrosa en el 84’, esquivando a Vida con un gran regate, pero su disparo cruzado se fue apenas desviado.

El tercer gol, merecido por el dominio del Panathinaikos desde el minuto 65, llegó en el 88’. Cerin hizo un excelente pase a Pellistri, quien centró para que Jeremejeff definiera con calidad, marcando el 3-1 (su séptimo gol de la temporada), resultado que se mantuvo hasta el final gracias a otra gran parada de Dragowski a un cabezazo de Vida en el tiempo de descuento.

Panathinaikos: Dragowski, Vagiannidis, Jedvaj, Ingason, Mladenovic, Siopis (90’ Arao), Maksimovic, Ounahi (65’ Cerin), Tete (66’ Djuricic), Pellistri (90’ Nikas), Swiderski (74’ Jeremejeff).

AEK: Brignoli, Rota (82’ Odubajo), Moukoudi, Vida, Gacinovic, Jonsson (59’ Eliasson), Pineda, Mantalos, Lamela (81′ Szymanski), Koita (59’ Fernandes), Pierrot (73’ Martial).